¿Clases fuera de la universidad en huelga?
Por: Oscar Yescas Domínguez
La universidad de Sonora cumple 35 días de huelga, debido al empecinamiento y autoritarismo de las autoridades universitarias. El conflicto amenaza prolongarse más allá de semana santa y probablemente tome todo el mes de abril. Rectoría no está dispuesta a negociar y los sindicalistas en huelga no piensan ceder ante sus demandas que consideran justas.
El conflicto está empantanado y en este contexto el Gobierno del Estado ofrece como una “salida” al conflicto crear las condiciones para que los estudiantes “no pierdan el semestre” y ofrecen instalaciones para que los alumnos tomen clases fuera de la universidad. Algunas voces de estudiantes en protesta por la duración de la huelga ven con agrado esta propuesta y surge la voz de un nuevo grupo “madres de familia” preocupadas por que sus hijos no pierdan el semestre.
El problema es que esta “alternativa” de solución es una falacia, es decir, es un engaño porque los estudiantes no van a recuperar el semestre y sólo perderán el tiempo si aceptan participar en esta simulación que no abona a la solución del conflicto.
¿Porqué no es viable esta medida? Podríamos empezar haciendo las siguientes preguntas:
1.- ¿Quiénes son los maestros que impartirán las clases? Con toda seguridad no serán maestros universitarios afiliados al STAUS. Es decir, no serán los titulares de las materias para las que fueron contratados, por lo que no habría continuidad y seguimiento de lo estudiado anteriormente, además de que se corre el riesgo de que se contraten maestros improvisados que no estén calificados para impartir las materias, por lo que se caería en una simulación donde los afectados serían los propios estudiantes.
2.- ¿Cuáles serían los contenidos del aprendizaje? Al inicio de cada semestre cada profesor universitario entrega a su grupo de alumnos un programa de la materia actualizado para generar el contrato psicológico de que esa es la tarea a realizar. Si los que acepten impartir clases fuera de la universidad no son los responsables de las materias, serían personas desconocidas y probablemente improvisadas y sin el perfil académico. Por lo que nuevamente el peligro de caer en la simulación surge de nuevo y los estudiantes serían los mas afectados.
3.- ¿Cómo se evaluaría el aprendizaje obtenido en unas cuantas semanas? La improvisación, la falta de programas de materias y la simulación no contribuirían a un aprendizaje efectivo ya que se daría más importancia a la calificación obtenida que al aprendizaje obtenido, con lo cual los más afectados serían los propios estudiantes.
4.- ¿Cómo se registraría en el expediente de los estudiantes la calificación obtenida fuera de la universidad?
Los profesores universitarios tenemos grupos de estudiantes asignados en función de las materias que impartimos. En el control administrativo tenemos una clave asignada y una firma electrónica para registrar la calificación en el sistema de Servicios escolares. Esto implica que es SOLO el maestro titular de la maeria respectiva el que puede subir y registrar calificaciones de sus grupos.
Si el maestro titular de la materia no acepta participar dando clases extramuros, las calificaciones obtenidas con otros profesores carecerán de validez legal y no serán reconocidas por autoridades educativas. Nuevamente los únicos perjudicados serán los estudiantes que habrán perdido tiempo, dinero y recursos asistiendo a clases fuera de la universidad que no tendrán valor alguno.
5.- ¿Cómo se garantizará la calidad de la educación recibida fuera de la universidad?
En la Universidad de Sonora existe un procedimientos para formar parte del personal académico, acordado entre autoridades administrativas y el STAUS. Para que alguien pueda ser profesor universitario, debe participar en un concurso de evaluación curricular en el cual se evalúa la experiencia de los aspirantes en base a una metodología previamente acordada y con el uso de formatos de evaluación que permiten asignar un puntaje objetivo a cada candidato. En mis 29 años como maestro de tiempo completo en la Universidad de Sonora he participado en cientos de concursos de evaluación curricular.
¿Quién contrataría a los profesores que acepten dar clases fuera de la universidad?, ¿cómo se garantizaría que las personas contratadas tengan el perfil académico ideal o acorde a las materias a impartir? Seleccionar profesores idóneos para impartir clases a nivel universitario no es como contratar un albañil.
Si se pasan por alto todos los procedimientos acordados en la contratación del personal académico en la Universidad de Sonora se estarían violando los derechos de los profesores titulares de las materias respectivas que tienen un contrato formal como responsables de las mismas.
Se estaría violando también los derechos de quienes dicen defender, es decir de los estudiantes, que esperan una educación universitaria digna y de calidad en su formación como profesionistas.
Por todo lo anterior la oferta de salvar el semestre impartiendo clases fuera de la universidad en huelga es un engaño y una simulación que tendría solo efectos negativos para quienes dice proteger, esto es los estudiantes.
La única alternativa de salvar el semestre es que trabajadores, maestros y estudiantes unidos estrechemos nuestra unidad como integrantes de la comunidad universitaria que estamos siendo afectados por la intransigencia de las autoridades universitarias y exijamos que asuman una actitud conciliatoria en las reuniones que efectúen con los dirigentes sindicales y las comisiones negociadoras para lograr que se levante la huelga cuanto antes.
Un paso para lograr lo anterior es impulsar un foro resolutivo en donde coincidan los tres sectores que integran la comunidad universitaria, es decir, trabajadores, maestros y estudiantes en el cual se discutan abierta y civilizadamente, es decir como verdaderos universitarios las alternativas de solución que pueden implementarse para levantar la huelga en términos satisfactorios para todas las partes.
Fuente: Sitio web del STAUS.
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