lunes, diciembre 17

Distingue Unison a "Beto Coyote" por su aportación al espíritu deportivo regional

Según los expertos, las mascotas deportivas ayudan a que el público se entusiasme en todo tipo de competencias --desde las escolares hasta las de equipos profesionales--, de tal forma que diversas compañías y organizaciones usan estos personajes disfrazados para presentar, inclusive, una imagen corporativa amigable.

El equipo de beisbol de paga de Hermosillo no es la excepción, y desde hace dos décadas adoptó a un personaje que, aunque no es estrictamente representativo sólo de estas tierras, se quedó para convertirse en el disfrute eventual de los asistentes al parque de pelota durante la temporada invernal.

Después de 20 años de marcar su territorio sobre la grama del estadio Héctor Espino con diversas rutinas, la noche del pasado domingo, en medio de una gran fiesta beisbolera, el Club Naranjeros de Hermosillo le brindó un reconocimiento a su mascota "Beto Coyote", evento al cual se sumó la Universidad de Sonora.

José Peralta Montoya, director de Comunicación, a nombre del rector Heriberto Grijalva Monteverde, hizo entrega de una placa al personaje, por su festivo aporte al deporte que enaltece el espíritu regional.

Fue en el cierre de la quinta entrada del juego Naranjeros-Tomateros cuando se llevó el emotivo acto, el cual forma parte del programa de despedida de ese escenario deportivo en lo que se ha llamado "El último capítulo", después de 40 años de servicio.

Previamente, el Club Naranjeros, el Instituto del Deporte Hermosillense y la Asociación de Cronistas Deportivos de Sonora (Asocrodes), también entregaron placas a Gerardo González, "Beto Coyote".


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Premia Unison a docentes distinguidos

HERMOSILLO, Sonora(PH)La Universidad de Sonora entregó el Premio Anual a Profesores, Investigadores y Trabajadores Distinguidos 2011-2012, reconocimiento que la alma máter hace a quienes durante el último año se han distinguido por su esfuerzo y dedicación.

En esta ocasión fueron 19 los catedráticos, investigadores, trabajadores administrativos y manuales de las tres unidades regionales los galardonados, quienes durante el último año han demostrado ser los mejores en su ámbito, indicó en su discurso el rector Heriberto Grijalva Monteverde.

Los trabajadores universitarios son parte de un equipo vital, sin cuyo esfuerzo cotidiano y permanente la institución no podría alcanzar el reconocimiento del que hoy goza a nivel local, regional, nacional e internacional, al ser considerada como una de las diez mejores universidades del país, señaló.

Maestros, investigadores, personal administrativo y de servicios son parte de nuestra esencia, y pilar fundamental para cumplir exitosamente con el mandato que la sociedad nos ha encomendado, y que representa la razón de ser de nuestra existencia: garantizar una educación integral para los jóvenes sonorenses, resaltó.

Muestra de ello son todas las distinciones que la Universidad ha recibido en el 2012, entre las que destacó el “Reconocimiento a la calidad de los programas de nivel licenciatura”, que por séptimo año consecutivo obtuvo la institución, así como el refrendo del “Premio SEP-Anuies al desarrollo y fortalecimiento institucional”, recordó.

A nombre de los galardonados, César Avilés Icedo, de la División de Bellas Artes y Humanidades, expresó su beneplácito el ver premiada una tarea que se realiza con gusto: formar como mejores seres humanos a los alumnos que recibe en el aula, laboratorio o cubículo.

Ante la realidad cambiante, la misión del maestro es irse actualizando conforme pasa el tiempo, porque hoy en día el buen maestro no es aquel que dicta cátedra ante una audiencia pasiva y callada, debemos ser consecuentes con enfoques educativos que respondan a las expectativas de generaciones que tienen un cúmulo de destrezas audiovisuales y computacionales, añadió.

En la ceremonia estuvieron presentes los secretarios generales administrativo y académico, Rosa Elena Trujillo Llanes y Enrique Velázquez Contreras, respectivamente; los vicerrectores de las unidades regionales Centro, Norte y Sur, Guadalupe García de León Peñúñuri, Arturo Baldenegro Campa y Saúl Robles García, además del dirigente del Sindicato de Trabajadores y Empleados (Steus), Modesto Torres Valerio.

lunes, diciembre 10

De presidentes, clase política y universidades


Lorenzo Meyer

LOS ESPACIOS DE CONVIVENCIA ENTRE LAS CLASES
 
¿En qué medida las élites que controlan las estructuras políticas quieren y pueden entender cómo transcurre la vida cotidiana y las preocupaciones, necesidades y aspiraciones de la mayoría de los miembros la sociedad que gobiernan?
Max Weber, el gran sociólogo alemán, señaló que "no se necesita ser César para entender a César"; con esa misma lógica es posible afirmar que no se necesita nacer, ni vivir y educarse como el común de los mexicanos para entender las formas vida de éstos, desde la precariedad del ingreso hasta la inseguridad sobre el futuro, desde la discriminación social y la injusticia hasta la sensación de tener que vivir al día.
Sin embargo, mezclar las clases y propiciar que los jóvenes convivan como iguales cuando aún se está formando su visión del mundo puede contribuir y mucho a desarrollar la empatía de las minorías afortunadas con las mayorías menos afortunadas. Así pues, para entender bien a César ayudaría mucho el tener que vivir un tiempo cerca de él y de su entorno.
En una sociedad como la mexicana, caracterizada históricamente por una probada polarización social y donde su clase gobernante se recluta hoy entre una auténtica minoría -entre las clases medias y altas-, ayudaría a bien gobernar el que sus miembros hubieran sido expuestos en su etapa formativa a un ambiente donde se diera una cierta convivencia interclasista en términos de igualdad.
En algunos países el servicio militar pone a los jóvenes provenientes de todas las clases y regiones en contacto mutuo, cotidiano y en condiciones de igualdad. En nuestro país eso sólo ocurrió por un corto tiempo cuando se instituyó en 1942 el no muy popular Servicio Militar Nacional y que requirió que los conscriptos vivieran acuartelados. El otro ambiente menos forzadamente integrador pero mucho más aceptable por todos fue la escuela pública. En el México moderno, las clases medias y altas se alejaron de la educación pública elemental y media cuando esta se hizo masiva, pero por un tiempo mayor la aceptaron como un destino deseable, por útil, en la etapa universitaria.
Las grandes universidades o tecnológicos públicos de la capital del país y las de algunos estados -Jalisco, Nuevo León, Veracruz, Puebla, entre otros- fueron vistos hasta no hace mucho como las arenas donde se formaban los cuadros altos de la clase política. Sin embargo, ya no es el caso o, si se quiere, lo es menos cada vez, y eso tiene, entre otros efectos, el acentuar el aislamiento entre las minorías dirigentes y las mayorías dirigidas.

·UNA HIPÓTESIS QUE DEJÓ DE SER VÁLIDA
 
En los 1970, es decir en las postrimerías del periodo clásico de la primera etapa del régimen priista -hoy estamos en el inicio de la segunda-, un académico norteamericano, Peter Smith, publicó un estudio sobre la composición y naturaleza de la élite política mexicana que poco después se publicó en español como Los laberintos del poder. El reclutamiento de las élites políticas en México, 1900-1971 (México: 1981). En esa obra, y después de reducir a estadísticas las biografías de 6,302 miembros de la élite política -presidentes, gobernadores, secretarios y subsecretarios de Estado, legisladores, directores de agencias descentralizadas y de empresas estatales, líderes sindicales y embajadores-, Smith resumió las reglas que un joven debería de observar si se proponía tener éxito en la política mexicana. Y resulta que la primera de esas normas era: "estudie una carrera universitaria, de preferencia en la UNAM". Y es que las 3/4 partes de la élite política posterior al fin de la Segunda Guerra Mundial tenía estudios universitarios y una porción importante en la UNAM. Entonces convenía a los que tenían ambición política ir no sólo a las grandes universidades públicas, sino a carreras muy específicas: derecho en primer lugar pero al final del periodo economía, medicina e ingeniería también abrían puertas que daban al poder.
Para Smith, la universidad en general, y la UNAM en particular, era importante para ingresar a la élite política no sólo por la calidad de la preparación que ofrecían, sino porque era ahí donde se forjaban las amistades y contactos que luego serían de utilidad para forjar alianzas y grupos que ayudaban a sobrevivir y destacar en la darwiniana carrera de la vida pública.
 
·LA MODIFICACIÓN DE LA HIPÓTESIS
 
De no haber sido asesinado en 1994, muy probablemente Luis Donaldo Colosio hubiera sido el primer presidente priista que hubiera hecho su carrera universitaria en una universidad privada: el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), donde estudió ya no derecho sino economía. Sólo circunstancias extraordinarias retrasaron lo que hace ya casi dos decenios se había hecho evidente: que por las características de la sociedad mexicana, de sus clases media y alta, las universidades privadas iban a desplazar a las públicas como el almácigo de la élite política.
Fue Vicente Fox y no Colosio el primer presidente del México contemporáneo que salió de una universidad privada -la Universidad Iberoamericana-, además, una con clara influencia religiosa (jesuita) y el primero en egresar de la carrera de administración de empresas. Su sucesor, Felipe Calderón, egresó de otra institución privada, la Escuela Libre de Derecho y obtuvo su maestría en el Instituto Tecnológico Autónomo de México. Finalmente, el Presidente actual, el que inaugura la segunda etapa del priismo en el poder, Enrique Peña, cursó su licenciatura en derecho en una universidad privada de raíz religiosa -la Universidad Panamericana- conectada al Opus Dei y la maestría la obtuvo en el ITESM.
Los dos últimos presidentes de la primera etapa del dominio priista -Carlos Salinas y Ernesto Zedillo- cursaron sus respectivas licenciaturas en instituciones públicas, pero una parte importante de su gabinete ya no tenía esa raíz en la UNAM o el IPN sino en las universidades privadas de élite. En los gabinetes posteriores este rasgo se acentuó, lo mismo que los posgrados en universidades foráneas, particularmente norteamericanas y del occidente de Europa.
En las biografías académicas del gabinete que acaba de ser nombrado por Peña, hay una mezcla de instituciones públicas y privadas. Quien aparece como eje del gabinete político, Miguel Ángel Osorio Chong, es del molde antiguo: cursó estudios de licenciatura en derecho en la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, pero su verdadera preparación tuvo lugar fuera de las aulas, en lo que puede llamarse "la universidad de la vida". Sus colegas, priistas viejos, sí pertenecen en su mayoría a la universidad pública. Sin embargo, quien quedó a cargo del eje económico, Luis Videgaray, es ejemplo perfecto de la nueva tendencia, la del Presidente y los más jóvenes, donde va ganando terreno la universidad privada: su licenciatura de economía fue en el ITAM y su posgrado en el Instituto Tecnológico de Massachusetts; cuando ejerció la docencia, lo hizo en el ITAM y en la Iberoamericana. Osorio y Videgaray y sus círculos son ejemplos conspicuos de dos fórmulas de educación de los miembros de la actual élite política.

·GENERALIZACIONES
 
Lenta pero sistemáticamente aumenta el número de "los que mandan" que se socializan en la atmósfera de los centros de educación privados que se consideran de excelencia y esto, como se sugirió, tiene implicaciones políticas y culturales. Entre otras, que refuerza la gran separación entre las clases que caracteriza a nuestro país. Es claro que no se necesita ser César para entender a César, pero un sistema educativo que en vez de propiciar la convivencia e intercambio entre las diversas clases refuerza su segregación no es lo más conducente para que los que gobiernan tengan empatía con los gobernados sino todo lo contrario. No es casualidad que no hace mucho un responsable de las finanzas públicas afirmara públicamente que con un ingreso de 6 mil pesos mensuales una familia podía ya disfrutar de la vida como clase media; obviamente ni idea tenía de lo que es tener que vivir con esa suma.
Si no es en las instituciones educativas, y aunque sea sólo en su etapa superior, ¿en dónde más podrían convivir de manera significativa, los pocos con los muchos? El problema es serio por sus profundas implicaciones sociales y porque nada indica que tenga solución en el futuro previsible.

sábado, diciembre 1

Reconocen a Ibarra Mendívil por crear Centro de las Artes

HERMOSILLO, Sonora(PH)Por crear el proyecto del Centro de las artes, la Licenciatura en Artes y detonar la profesionalización en programas educativos el Secretario de Educación y Cultura, Jorge Luis Ibarra Mendivil y ex rector de la Universidad de Sonora obtuvo un reconocimiento especial de parte de esta institución, hoy a cargo de Heriberto Grijalva.

La comunidad artística universitaria, lideres, literarios, autoridades, investigadores, el departamento de Bellas Artes de Unison, hizo un extensivo reconocimiento por la promoción, creación y apertura de la Lic. En Artes y del propio centro de las Artes del maestro Ibarra por la gestión y profesionalización del arte.

“Un antes y un después a la fecha es el resultado de la actividad, productos y oferta que se ha desarrollado en materia de arte y cultura, por ello el reconocimiento”. 

La sociedad reconoce el trabajo que sigue en los alumnos, maestros y artistas involucrados en este tema, el cual se refuerza en la actualidad y sigue en importancia en la universidad. 

“La idea no solo fue crear un recinto especial para el impulso de las artes sino abrir el panorama, las manifestaciones artísticas, conciertos, actividades prácticas, recorridos para que la sociedad conociera mas del trabajo de la comunidad artística”, destacó Ibarra Mendivil al agradecer la distinción recibida.

A 15 años, continuó, se que este aniversario del departamento de Lic. en Artes, tiene un significado muy profundo para la comunidad artística sonorense, en su momento se conjuntaron todas las condiciones para convertir cada una de las academias en un programa profesional, por ello emito el reconocimiento, el trabajo de todos los maestros, alumnos, egresados y en general a la Universidad de Sonora, que han desempeñado durante todo este tiempo y que hacen de esta licenciatura una opción más de preparación profesional para los jóvenes sonorenses. 

"Formarnos en el arte es aspirar a formar seres humanos plenos, por eso yo me congratulo de estar este día aquí festejando, felicidades".

Dijo que es importante seguir con estas acciones particulares, de equipo, de grandes figuras y de nuevos talentos al impulsar estrategias de apertura y generales para la sociedad misma, para el aprendizaje diario de alumnos y la mejora de maestros en el proceso de la consolidación de mejora y avance en el aspecto de las artes y la cultura.

La Universidad de Sonora develó una placa por 15 años de la promoción y profesionalización del arte, de los programas educativos en la Unison a través del departamento de Lic. En Artes, marco en el que se reconoció la promoción y gestión de Jorge Luis Ibarra Mendivil y se destacó la importancia que implica las múltiples acciones emprendidas por la comunidad artística.

En el evento se entregaron reconocimientos a docentes de la licenciatura que han impartido clases en dicho programa académico en distintos períodos, posterior a esta ceremonia, las autoridades, junto a los jóvenes y demás público asistente, presenciaron una Muestra de Gala, realizada por estudiantes y egresados de esta licenciatura que consistió en un programa artístico que incluyó teatro, danza y música.

Jorge Luis Ibarra desarrolló gestiones varias, el impulso del Departamento de la Licenciatura en Artes de la Unison, durante su período al frente del alma mater de 1993-2001.

Destacan 4 sonorenses en la 23° Olimpiada Nacional de Física

HERMOSILLO, Sonora(PH)José Daniel Castro Cisneros, Rafael Antonio García Mar, Rubén Darío Araiza Acosta y Daniel Iván Casas Gautrín se destacaron en la Vigésimo tercer Olimpiada Nacional de Física realizada en Mérida, Yucatán, informó Raúl Pérez Enríquez.

El delegado de las Olimpiadas Nacionales de Física en Sonora comentó que los jóvenes fueron seleccionados de entre 48 estudiantes que participaron en otro certamen organizado por la Universidad de Sonora.

En este filtro se eligieron a 14 estudiantes que se prepararon con entrenamientos intensivos durante ocho semanas, más dos previas y en septiembre el número se redujo a ocho alumnos que más tarde se tomaron solo a cuatro.

La Olimpiada Mexicana de Física que se llevó a cabo del 25 al 29 de noviembre y la delegación estatal estuvo representada por dos alumnos destacados del Colegio de Bachilleres (Cobach) plantel Reforma y dos del plantel Villa de Seris.