viernes, noviembre 28

Sigue en terapia intensiva la alumna de la Unison


Por José Luis Jara / Dossier Politico

Dia de publicación: 2008-11-28

Zaira Abilene Nuñez Ozuna se internó en el Hospital General del Estado para que le operaran las anginas el pasado 14 de noviembre, pero a la fecha no ha abandonado el nosocomio porque se encuentra en el área de terapia debido a las consecuencias de un supuesto accidente en la cirugua que le provocó daños en el cerebro.

De acuerdo al informe médico que ayer recibieron los padres de la muchacha de 21 años y estudiante de la Universidad de Sonora, en la operación "se presenta extubación accidental reintubándose inmediatamente, no logrando recuperar saturación adecuada de oxigeno inmediata".

La operación que inició a las 11:50 horas de ese 14 de noviembre para diseccionarle las amígdalas, terminó las 13:50 pero con el resultado de que ese accidente le provocó probablemente encefalopatía anoxoisquémica.

Es decir, por la falta de oxígeno en el cerebro que quiere decir, que una parte del cerebro sufrió un daño por la falta de oxígeno y riego sanguíneo, motivo por el cual puede haber zonas de necrosis, o sea muerte de neuronas.

Eradio Nuñez Esquer es el padre de la joven estudiante. Es pescador y se encuentra con su esposa al pendiente de Zaira.

Eradio afirmó que este caso es una muestra evidente de negligencia médica, pero en la entrevista prefirió abstenerse de dar una opinión sobre los médicos que realizaron la intervención quirúrgica.

Prefiere puntualizar su demanda: que el gobierno se haga responsable del tratamiento y rehabilitación de su hija, por la razón de que debe respaldar este tipo de situaciones y no condenar a las víctimas y sus familiares con los gastos que provocan estos lamentables errores.

"Somos originarios de Puerto Peñasco. Mi hija estudia ciencias de la comunicación en la Universidad de Sonora y vino a internarse al hospital, porque iba a ser operada de las anginas el 14 de noviembre. Y así fue, la internaron pero hasta la fecha se encuentra en terapia intensiva", relató.

El padre de la alumna dice que las autoridades del hospital atribuyen el problema a un accidente que tuvieron. Pero a la vez señaló que no les informan con claridad la clase de accidente que se presentó en la cirugía.

De acuerdo al parte clínico, Zaira se encuentra en estado consciente, respondiendo a estímulos verbales,

obedeciendo órdenes simples y movilizando las cuatro extremidades.



Dice que se mantiene en estado de observación a la vez que se le inició el manejo por medicina física y rehabilitación.

Sin embargo, en opinión de los padres, el panorama no es tan halagador lamentablemente, porque Zaira no muestra esos avances

Eradio dijo que el estado en que se encuentra su hija, es de conciencia mínima. Así se lo han dicho los médicos. Y él relató que Zaira se mantiene con los ojos abiertos pero con mirada perdida. Él cree que lo reconoce cuando le habla, pero no se siente seguro de ello.

A los diez días de que pasó la operación, a Zaire la hicieron un estudio que diagnosticó que se le van a presentar secuelas y que va a necesitar rehabilitación.

Los padres de la joven no quieren hablar de los médicos. Prefieren reservarse los nombres de los doctores que intervinieron en el trabajo, porque son humanos y afirman que no quieren lastimar a nadie, ni truncarle su carrera.

-¿Pero sabe lo que es la negligencia médica?

-A todas luces, lo que pasó con mi hija es negligencia médica. Andamos en eso. Vamos a pedir que se investigue bien cómo se dieron las cosas y demandar que se firme un compromiso para que el gobierno se haga cargo de las medicinas y del tratamiento y rehabilitación de Zaira.

En torno a este caso se generó la reacción de la maestra Catalina Soto. Ella fue elegida como la defensora de los derechos humanos de la Universidad de Sonora y le procuró la asesoría jurídica. Un doctor de la escuela de Medicina se apuntó para asesorar a los padres de Zaira en los aspectos médicos. Y los estudiantes de ciencias de la comunicación fueron los que protestaron en el hospital para exigir la atención a los familiares de Zaira, porque al principio, las autoridades del nosocomio se negaban a ofrecer información del estado de la paciente a sus padres.

Don Eradio afirmó que después de este daño, su demanda es que las autoridades se hagan responsables de la atención y rehabilitación de su hija.

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